Cómo consumimos el contenido de una página web cambia el cómo la diseñamos y qué publicamos en ella. Los internautas modificamos constantemente nuestros hábitos y por eso las empresas, junto a sus equipos de marketing y de diseño web, deben adaptarse a nuestros caprichos.
Como recalcan muchos de los especialistas en posicionamiento orgánico, el SEO es cuestión de portarse bien. Si alguien que sabe escribir para su público, escribe realmente para ser leído por personas y no por robots, se ganará el corazón de Google. El contenido no debe forzarse.
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Eso sí, uno debe ser constante y tampoco hay que dormirse en los laureles. Si piensas que lo estás haciendo bien, pero no ves los resultados deseados, ¡ojo! Una de dos: o realmente no te estás portando bien o hay algo de fondo que debe revisarse.
En el título de esta publicación te hemos prometido la fórmula web definitiva, y te la daremos, pero no se trata de una fórmula matemática, sino de buenas prácticas.
Una web exitosa debe estar formada por dos de los grandes atractivos online: Un diseño que quite el aliento y un contenido de calidad que te deje perplejo.
Un diseño que quite el aliento
¿Qué es un diseño web que quite el aliento? Está claro que para gustos, colores. No dejarás boquiabierta a toda la humanidad por miles de euros que inviertas en el diseño de tu web.
Pero, ¿para qué querrías ganarte al universo entero? A ti lo que te interesa es dejar sin aliento a tu target. Para ello, debes conocer muy bien quién es tu público: cuáles son sus gustos y sus manías.
Si tu público objetivo tiene entre 20 y 35 años, tu web no se verá igual que si quieres dirigirte a un público de entre 50 y 60 años. En este caso, tal vez debas decantarte por algo más serio.
También dependerá mucho del tipo de producto que ofrezcas. Para empezar, tu web será muy distinta si vendes un producto que si vendes un servicio. Si vendes un producto, las imágenes prevalecerán sobre el texto.
En cambio, si ofreces un servicio, tu imaginación deberá ir mucho más allá. No tendrás imágenes de productos en sí, por lo que tendrás que conseguir imágenes del quiénes sois, cómo trabajáis, jornadas en las que participáis, etc. En este caso, podrías optar también, por ejemplo, por infografías o ilustraciones.
Consulta este post si quieres aprender cómo definir tu público (buyer-persona) y su trayectoria (buyer’s journey). Tómatelo con calma, investiga y conviértete en un experto por y para tus clientes.
10 ideas para un diseño de impacto según las últimas tendencias
1) La importancia de las imágenes sobre el texto. No significa que no podamos utilizar texto, pero hay que tener en cuenta que la gran mayoría de los internautas se decantan por el contenido visual. No hace falta escoger entre texto e imagen, ambos pueden convivir. Pero haz prevalecer las imágenes y vídeos sobre el texto en tu web.
2) La apuesta por el scroll. Aunque al principio no se aceptó como la mejor de las funcionalidades de una web, actualmente hasta le hemos cogido cariño. Un largo scroll que reduzca el número de clics es una comodidad para el usuario. Así te aseguras que de un vistazo y utilizando sólo el scroll, tu visitante conozca tu empresa. Además, en cierta manera, este tipo de webs te permitirán controlar qué ve primero el usuario y en qué orden.
3) ¿Ha muerto el menú hamburguesa? Aunque el hamburger menu tuvo su momento de éxito y te permitía aprovechar totalmente el espacio de la home, parece no ser el tipo de diseño más funcional para los usuarios. Algunos son los internautas que todavía no reconocen qué es un menú hamburguesa. Aún así, creemos que se trata de un menú muy funcional y atractivo si trabajas para un target joven y experto en web. En cambio, si tu público objetivo no está familiarizado con la red, mejor decántate por un menú clásico.
4) El video marketing, un as bajo la manga. El contenido audiovisual atrae más a los usuarios de Internet y les hace permanecer en tu página web durante más tiempo. Esto se traduce en un mejor posicionamiento para tu web en Google. Según Forrester Research, incluyendo vídeos tienes hasta 50 veces más posibilidades de aparecer en las primeras posiciones de los resultados de Google.
5) Imágenes duotono para webs minimalistas. Se aplica básicamente en las imágenes principales de la web (en la home, por ejemplo). Se trata de presentar una imagen haciendo uso de dos colores y destacando la iluminación. Una imagen duotono nunca pasa desapercibida.
6) El juego de las tipografías. Utilizar hasta 3 tipografías distintas en una misma web es viable y hasta te puede ayudar a atraer la atención de tus usuarios. Actualmente es muy fácil jugar con tipografías nuevas gracias a Google Fonts. Y no sólo las distintas tipografías te ayudarán a cautivar a los internautas, experimenta también con el tamaño y los colores de tus textos. Capta la atención de tus visitantes. Hazles mirar donde quieres que miren.
7) Colores llamativos y brillantes. Han ganado la misma popularidad que el flat design (diseño minimalista). Te pueden ayudar a captar la atención del usuario en la home o en algunos CTA. Este tipo de colores favorecerán o no a tu web dependiendo mucho de tu producto y de tu target.
8) Asimetría, pero sin pasarse. Un pequeño caos asimétrico ayudará a llamar la atención del usuario hacia ciertas zonas de tu web. Pero utilízalo sólo si crees que este tipo de diseño encaja con tu marca y con tu público. De todas maneras, la simetría nunca pasa de moda y siempre es una buena compañera.
9) No seas una empresa más. Utiliza el storytelling para contar la historia que te diferenciará de tu competencia. Aprende más sobre el storytelling en esta publicación.
10) El carrusel de imágenes ya se fue. Ha pasado de moda y estorba al usuario. Los estudios realizados sobre la experiencia del usuario en webs indican que el visitante no clica sobre las imágenes de un carrusel y, además, sin aportar información relevante, estas imágenes en movimiento despistan al usuario del contenido verdaderamente importante.
Estas son sólo algunas ideas, no hay que utilizarlas todas (tampoco hay que parecer un pastel de boda). Según tu público y tus objetivos, escogerás unas u otras características.
Por supuesto, un diseño responsive es básico. Tu página web debe poder verse correctamente y tener todas sus funcionalidades activas se visite desde el dispositivo que se visite.
Contenido de calidad que te deje perplejo
Obviamente sabemos que no dedicas tanto tiempo al contenido de tu web por amor a la escritura. Eres una persona ocupada y quieres que tus esfuerzos tengan su recompensa.
Aunque no hay que engañar a Google para posicionar en los primeros resultados, tampoco hay que pecar de ingenuos. Al fin y al cabo: queremos esa primera posición.
Check-list para hacer SEO responsable, pero eficiente
Revisa la lista que te dejamos a continuación antes de publicar cada post. Sí, antes de cada post. ¿Por qué? Porque cada uno de los artículos de tu blog se crean en una página distinta, es decir, con su propia URL y, ésta, debe estar optimizada para el SEO.
1) Has escogido una palabra clave que tus usuarios buscarían en Google para resolver sus dudas o problemas respecto a los productos o servicios que tú ofreces.
2) Esta palabra clave está en la url de la página del post, sin preposiciones ni acentos y colocada lo más a la izquierda posible.
3) Has incluido, al menos, una imagen atractiva y de alta calidad.
4) La keyword (o palabra clave) se encuentra en el título del post, varias veces en el texto (sin abusar, no más de 5 veces, aunque puedes utilizar sinónimos) y en el texto alternativo de las imágenes.
5) Has escrito una metadescripción para la publicación que incluye la keyword.
6) Has introducido enlaces internos (de tu misma web o blog) con contenido relacionado.
7) Los enlaces se abren en una pestaña nueva.
8) El post está bien maquetado y estructurado (subtítulos, negritas…)
Es muy importante que te plantees si tú mismo leerías tu post. ¿Lo leería tu colega? ¿Lo leerías varias veces sin aburrirte? Si tu respuesta es no, ¿por qué quieres que lo hagamos nosotros? No nos tortures con contenido de baja calidad.
Tu usuario se va a enfadar si le ofreces la panacea en el título del artículo y una vez has conseguido su ‘clic’ se encuentra con contenido insulso. No hagas perder el tiempo a tu potencial cliente, no le engañes. Si lo haces, no va a volver a tu web ni compartirá tu contenido.
Por último, un listado de preguntas que chequear antes de clicar sobre el botón ‘Publicar’.
10 preguntas que plantearte antes de publicar contenido nuevo
1) ¿Es de interés para tu buyer-persona (público objetivo)?
2) ¿Le vas a enseñar algo nuevo a tu usuario o se trata sólo de palabrería?
3) ¿El título es atractivo?
4) ¿Te has asegurado de que el texto no contenga erratas ni faltas de ortografía?
5) ¿Es tu contenido mejor que el de tu competencia?
6) ¿Has incluido un CTA? (Botón de llamada a la acción con contenido de interés y descargable para tu usuario).
7) ¿Ya sabes cómo y cuándo vas a compartir el contenido en tus redes sociales?
8) ¿Vas a publicar el post en el momento idóneo? (Día de la semana y hora)
9) ¿Has incluido imágenes atractivas y de interés? (Infografías, gráficos…)
10) ¿El texto fluye o es muy pesado de leer?
Piensa que, si fuerzas la máquina (haciendo stuffing, por ejemplo), tu estrategia de contenido web no funcionará. Sé realista, no vas a engañar a Google. Entonces, ¿no crees que es mejor ser su colega?
Recuerda, dedica tiempo a tus contenidos, más vale calidad que no cantidad.