Es esencial que sepas responder al por qué. ¿Por qué has iniciado este proyecto? No hace falta que rindas cuentas a nadie, sólo a ti mismo. Tómate unos segundos para responderte.
Si tienes claro que te has embarcado en esta aventura porque te entusiasma, porque eres el rey del sector y porque nos vas a dejar a todos boquiabiertos, ¡sigue leyendo!
Analiza la situación de tu empresa y responde: ¿Cuál es mi objetivo?
De acuerdo, ya tenemos claro que vas a triunfar. Ahora nos falta saber cómo utilizar el plan de marketing digital para conseguirlo. ¿Qué objetivo tienes en mente? ¿Has analizado la situación de tu pyme?
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Tómate unos minutos para realizar un DAFO sobre tu empresa. Aquí te dejamos un enlace con una guía práctica sobre cómo hacerlo. De esta manera tendrás una visión muy clara de las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades de tu empresa.
Tras realizar el DAFO, seguro que ya conocerás un poco más tu empresa y sabrás qué puntos puedes aprovechar para potenciarlos y qué elementos te amenazan y debes posicionarte para combatirlos.
Bien. Y ahora que te conoces un poco más, ¿qué quieres conseguir con tu inversión de tiempo y dinero en marketing digital? ¿Más ventas? ¿Darte a conocer internacionalmente? ¿Aumentar tus ventas en la web? Es esencial que lo tengas claro.
Por supuesto, tus objetivos irán cambiando a lo largo del tiempo. No te preocupes. Y con ellos, también cambiará tu plan de marketing y el presupuesto que le dediques. Pero lo importante es empezar.
Analiza a tu competencia. Después, aléjate de ella.
¿Te has parado a estudiar detenidamente quién es tu competencia, qué hace y a qué precios vende? Pues este debe ser tu segundo paso en esta aventura. Se llama crear un benchmark.
Abre una hoja de Excel en la que añadirás aquellos elementos que creas que son más importantes para tu sector: diseño de la web, presencia en redes sociales, calidad del producto, video marketing…
Haz una búsqueda de tus principales competidores (online y offline) y añádelos a tu benchmark. Ahora analiza a cada competidor según los valores que hayas escogido en el paso anterior y ve marcando cuáles siguen buenas estrategias y cuáles no tienen tan buenas prácticas.
Puedes clasificarlos por colores (verde para las mejores prácticas, naranja para los pasables y rojo si no trabajan o ejecutan mal la acción). Así verás de manera muy visual dónde flaquea tu competencia y dónde tienes más oportunidades de éxito.
Después, diferénciate.
Es muy importante que sepas qué hace diferente a tu empresa: ¿Tenéis un trato más directo con el cliente? ¿Sois los únicos en realizar venta online? ¿Vuestros productos son personalizados?
Comunica tus diferencias
Tu diferenciación debe ser tu carta de presentación. Si creas un producto a medida, véndelo como tal. No dejes el atributo “a medida” para más tarde. Tu diferenciación debe ser lo primero que vean tus clientes. En tu web, en tus tarjetas de visita, en la alfombrilla de entrada de tu casa.
Tu primer plan de marketing digital
Ahora viene la parte que más pereza te daba: plasmarlo todo sobre el papel.
En realidad será una liberación para tu mente. Deja por escrito todas las ideas que han ido surgiendo y quítate ese peso de encima. Crear tu propio Plan de Marketing es más fácil de lo que te piensas. Utiliza esta plantilla. Es una buena manera de empezar y podrás organizar todas tus brillantes ideas.
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¿Sabes lo que quieres? Fija un objetivo para tu web
Una website puede ser tan y tan diferente según cuál sea su objetivo, que fijar tus metas online debe ser tu siguiente prioridad.
Tu web como escaparate
¿Tienes fotos espectaculares de tus productos? Entonces tal vez te interese utilizar tu website como escaparate. En este caso, escoge una plantilla web plana y muy sencilla que potencie sobre todo la imagen. Minimiza el texto.
Los usuarios valoran y, de hecho, buscan que al pasar con el ratón por encima de una fotografía o clicar sobre ella ésta aumente de tamaño. Es una característica que debes tener en cuenta si quieres aumentar las conversiones.
Tu web como tienda online: Ecommerce
Si tu modelo de negocio radica en la venta online o quieres explorar este nuevo canal de venta, lo que necesitas es crear un Ecommerce. Existen plugins que te permiten incorporar un carrito de compra en tu página web creada con WordPress, por ejemplo.
Pero cuidado, la venta online ya supone estar trabajando con datos de tarjetas de crédito y tu web debe estar preparada para este tipo de información y contar con una pasarela de pago fiable.
Si tienes claro que quieres utilizar tu plataforma web para vender tus productos online pero no sabes muy bien cómo, consulta con algún experto todas las especificaciones necesarias.
¿Un blog? Sí, por favor
Así como una página web está dedicada a la información corporativa de la empresa, el blog es una herramienta de comunicación de tú a tú con el usuario. Y es una parte importante del plan de marketing digital.
Debes permitirle interactuar contigo. Activa siempre la opción de comentarios (existen herramientas para controlar el spam y los mensajes inadecuados). Además, de esta manera puedes conseguir el contacto del usuario y aumentar cualitativamente tu base de datos.
No olvides ofrecer la opción de compartir tu contenido en las redes sociales. Nunca incluyas los iconos de share al final del post. El usuario no tiene por qué leer todo el texto, puede querer compartirlo antes.
Lo ideal es anclar los iconos de las redes sociales para que sean visibles en todo momento, aunque el usuario haga scroll.
Existen muchas herramientas dedicadas a mejorar el flujo de los share. Piensa qué redes sociales son las más interesantes para tu pyme e investiga sobre ello.
Recuperamos este post por si ya estás preparado para conocer alguna de las mejores herramientas de marketing digital.
