El paisaje digital ha transformado la manera en que las empresas interactúan con sus clientes y potencian su marca. Si bien esto ha proporcionado una multitud de nuevas oportunidades, también ha elevado la barrera de lo que se espera en términos de engagement y personalización. En el mundo de los productos gourmet, esta evolución ha tenido un impacto significativo, permitiendo a las marcas crear experiencias más enriquecedoras y memorables para sus huéspedes y clientes.
Treurer
Treurer, una emblemática finca situada en Mallorca, es un testimonio viviente de la tradición olivarera de la isla. Con su rica historia y dedicación a la producción de aceite de oliva virgen extra, Treurer deseaba elevar su presencia en el mercado y ofrecer a sus clientes una experiencia auténtica e inmersiva en el mundo del aceite de oliva, fusionando tradición con modernidad.
Para ello, se requería una estrategia de marketing innovadora y efectiva que no solo atrayera a nuevos clientes, sino que también fortaleciera la relación con los ya existentes. La cuestión era: ¿cómo capturar la esencia de Treurer y transmitirla de manera efectiva en el mundo digital, asegurando al mismo tiempo un crecimiento sostenible y escalable? Esta ha sido la base de nuestro emocionante proyecto con Treurer.
El reto
La solución
Resultados
El reto
Treurer, con su arraigada tradición en la producción de aceite de oliva y su esencia mediterránea, ya poseía todos los elementos para cautivar a un público ávido de experiencias auténticas y memorables. Sin embargo, a pesar de la indiscutible calidad del producto y valor histórico de su finca, la empresa enfrentaba desafíos significativos en el ámbito del marketing.
Primero, el mercado internacional del aceite de oliva virgen extra, aunque en crecimiento, es altamente competitivo. Marcas consolidadas y nuevos entrantes luchan por un espacio en la mente y el corazón de los consumidores, lo que hace difícil diferenciarse y destacar.
Treurer necesitaba una forma de comunicar su propuesta única de valor de manera efectiva, resaltando no solo la calidad de su producto, sino también la experiencia inigualable que ofrecen en su finca.
Si bien Treurer contaba con una base leal de clientes recurrentes, la necesidad de atraer a un público más joven y digitalmente activo era evidente. Esta nueva generación, acostumbrada a interactuar con marcas a través de múltiples canales digitales, demanda contenido relevante, experiencias personalizadas y una comunicación bidireccional.
Por último, la finca también buscaba formas de reforzar su relación con sus clientes, inspirándolos no solo a regresar, sino también a convertirse en embajadores de la marca, compartiendo su amor por Treurer.
Así, el reto era triple: destacar en un mercado saturado, conectar con una audiencia digital y fortalecer la lealtad de los clientes existentes. Todo ello, sin perder de vista la esencia y tradición que hacen de Treurer un lugar tan especial.
La solución
Ante el reto planteado, Treurer buscó una propuesta revolucionaria: la creación de una comunidad holística centrada en el aceite de oliva virgen extra. Una experiencia que no se limitara únicamente a la degustación del producto final, sino que permitiera a los visitantes sumergirse en cada una de las facetas que hacen del aceite de Treurer una joya auténtica.
La finca y el cultivo
La inmersión empezaba en los campos. A través de rutas guiadas por la finca, los visitantes podían conocer de cerca el meticuloso proceso de cultivo y cuidado de los olivos, comprendiendo las tradiciones agrícolas, el respeto por la tierra y la sostenibilidad esencial en la operación diaria.
El proceso de elaboración
La experiencia continuaba en la almazara. Aquí, se desvelaba el proceso de extracción del aceite, combinando técnicas modernas con métodos tradicionales.
Las demostraciones en vivo y las explicaciones detalladas permitían a los visitantes entender el distintivo y la calidad que caracterizan al aceite de Treurer.
Experiencias gastronómicas
Pero no todo quedaba ahí. En la cocina, chefs expertos en el aceite de oliva virgen extra ofrecían demostraciones culinarias usando técnicas innovadoras, mostrando cómo el aceite de Treurer podía transformar y realzar cualquier plato, así como cenas temáticas en las que degustar recetas basadas en su aceite de oliva virgen extra.
De esta forma, los visitantes no solo aprendían sobre las propiedades del aceite, sino también nuevas maneras de incorporarlo en su cocina diaria y en los momentos de celebración.
Formación culinaria para chefs
Uno de los pilares de la experiencia Treurer es la educación gastronómica. Treurer organiza sesiones de formación dirigidas a chefs, donde se les instruye en el uso óptimo del aceite de oliva virgen extra en la cocina y se les introduce a técnicas innovadoras que realzan este ingrediente.
El propósito es que estos profesionales puedan llevar el aceite de oliva virgen extra a nuevos horizontes culinarios y, al mismo tiempo, servir como embajadores de la marca en sus respectivos entornos.
El agroturismo
Y para quienes deseaban sumergirse por completo en esta experiencia, Treurer incorporó un hotel en la finca. Este espacio permite a los visitantes vivir la esencia del aceite de oliva virgen extra de forma plena, despertando entre olivos, disfrutando de la serenidad del campo mallorquín y, por supuesto, degustando las exquisiteces culinarias que el aceite de Treurer podía ofrecer en cada comida.
El hotel no era solo un lugar donde alojarse; era una extensión de la experiencia, una invitación a vivir el mundo del aceite de oliva desde el amanecer hasta el anochecer.
Con esta propuesta holística, Treurer no solo ofrecía un producto, sino una narrativa viva, una experiencia completa que comenzaba en el campo y culminaba en el paladar, dejando en cada visitante una profunda apreciación por la dedicación, tradición e innovación detrás de cada gota de aceite.
Resultados
El revolucionario enfoque de Treurer dio lugar a resultados excepcionales, tanto en términos tangibles como intangibles.
Crecimiento del reconocimiento de marca
Gracias a la combinación de educación, gastronomía y turismo, la marca Treurer aumentó su notoriedad no solo en Mallorca, sino también a nivel internacional. Aquellos que experimentaron el mundo de Treurer se convirtieron en embajadores genuinos, compartiendo sus experiencias y recomendando el aceite y las vivencias que la finca ofrecía.
Incremento de la cifra de negocios
Con el mayor conocimiento del producto y la apreciación del proceso detrás de cada gota de aceite, los visitantes y chefs formados en Treurer se convirtieron en clientes leales. Esto se tradujo en un aumento sostenido de la cifra de negocios.
Reservas en el hotel
El agroturismo se convirtió en un destino codiciado. Muchos visitantes optaron por prolongar su experiencia, reservando estancias para sumergirse aún más en la cultura del aceite de oliva. Las críticas positivas en plataformas de viajes y boca a boca llevaron a una alta tasa de ocupación ya desde el momento de su inauguración.
Impacto comunitario
Más allá de las métricas comerciales, Treurer tuvo un impacto significativo en la comunidad local. Generó empleo, promovió el turismo sostenible y reforzó la importancia del patrimonio agrícola y gastronómico de Mallorca.
Reconocimientos y galardones
La innovación y excelencia de Treurer no pasaron desapercibidas en la industria. La marca recibió varios premios y reconocimientos internacionales, consolidando aún más su posición como líder en la promoción del aceite de oliva virgen extra.
En resumen, el audaz giro de Treurer hacia la creación de una experiencia integral en torno al aceite de oliva virgen extra no solo redefinió su marca, sino que también estableció lo que puede ser un nuevo estándar para el sector.
El impacto de su enfoque resuena en los testimonios de visitantes satisfechos, en los números de ventas y en el fortalecimiento de la relación entre el consumidor y el productor, basada en el conocimiento, el respeto y la pasión por un producto excepcional.
El viaje de Treurer es un testimonio del poder de la innovación y la visión en el mundo de los negocios. Lo que comenzó como una simple idea para enriquecer el mundo del aceite de oliva virgen extra, se transformó en una revolución que abarcó turismo, gastronomía y educación. En este proceso, Treurer no solo mejoró su posición en el mercado, sino que también redefinió lo que significa crear una experiencia alrededor de un producto.
A medida que Treurer avanza hacia el futuro, la marca se ha establecido firmemente como un referente en su sector. Sin embargo, más allá de los logros y el reconocimiento, la verdadera victoria reside en la capacidad de la empresa para conectar con las personas, celebrar su patrimonio y compartir el rico universo del aceite de oliva virgen extra con el mundo.